Ñaco Goñi, Danny Boy y Mingo Balaguer, tres pesos pesados de la armónica en España, tres veteranos que se han dejado la piel – sobretodo de los labios – en los escenarios. Tres armónicas y un proyecto común: Duelo de armónicas – Spanish Blues Attack, el resultado: Un excelente disco del que ya podemos disfrutar los aficionados.
Se compone de varios temas grabados en el Café Populart de Madrid y en el Festival de Blues de Béjar (Salamanca) junto a músicos de la talla de Armando Marcé (Ñaco y los Bluescavidas) a la batería; el gran Fernando Torres (Mingo & The Blues Intruders) al bajo; y Quique Bonal (Mingo & The Blues Intruders) a la guitarra, además de una colaboración de Antonio Serrano a la cromática en uno de los temas.
El disco, se presenta en «Digipack» con un diseño cuidado y sobria serigrafía en el CD. Si hace años Alligator tuvo la brillante idea de juntar a Carey Bell, Billy Branch, James Cotton y Junior Wells, Gaztelupeko Hotsak no ha tenido dudas con esta Spanish Harp Blues Attack.
Carmelo, Bluesbordes, ha podido disfrutar de este «ataque» armoniquero y nos cuenta sus impresiones sobre el disco:
El disco abre con un blues arrastrado, «Driftin’& Driftin’ » que deja con buen sabor de boca para cambiar radicalmente de palo hacia el Boogie con un «Baby’s Boogie» de riff pegadizo que hace que se te mueva el cuerpo, armónicas entralazadas que se quedan en la boca para masticarlas y comprobar paulatinamente lo deliciosas que son. El tercer tema es una versión de un tema bastante conocido: «Early in the morning» pero a manos de unos tíos que saben lo que hacen y demuestran lo que es tener ‘feeling’. Después de esta descarga de fuerza dan entrada a un tema que deja ver desde el principio que lo que está sonando es Chicago 100%: «Garbage Man» te transporta al Chicago de los 50 y te hace mover el cuello a golpes de puro ritmo. Tras el subidón de adrenalina nos calman de nuevo con «Borracho» (acertado título para un blues), un blues lento aún más arrastrado que el primero que te deja totalmente laxo y exclamando ‘¡Oh baby, estos tíos sí que saben lo que es el blues!’ y ¡encima en español!
Tras la calma llega otra tormenta «chicaguera» con el «Everything Is Gonna Be Allright«, tremendo, ¡qué respeto a los grandes! y ¡cómo saben materializar un tema y para que disfrutemos y nos marquemos unos bailes!. No nos dejan descansar, nos arrastran con un shuffle, con un nombre que lo explica todo: «Shuffle Intro«, para qué decir más, disfrutemos de un buen shuffle. Si de tocar palos se trata no nos quedemos cortos, jump blues ¿por qué no? con el tema «Flip, Flop & Fly», plenamente, creado para bailar y disfrutar y para no parar mientras el láser siga funcionando.
Nos deleitan con el «Populart Boogie«, que supongo que será un tema realizado en homenaje al Café Populart o bien una improvisación realizada en dicho garito (no olvidemos que el disco está grabado en los conciertos que tuvieron lugar en el Café Populart de Madrid y en el Festival de Blues de Béjar, Salamanca). Sobra casi decir que estos «fieras» son auténtico Blues. Solo tras solo de armónica consiguen que la gente se deje las manos al rojo vivo palmeando a ritmo de boogie.
El penúltimo tema: «Go to Go» que te da un rollo «vacilón» en el cuerpo, te va contagiando el ritmo, y es inevitable acabar dando golpecitos con los pies siguiendo el compás. Como guinda del pastel y para irte contento a dar una vuelta «South Bay Beatdown«, último corte del disco pero que desprende una energía y un feelin’ que son cosas de otro mundo, que te deja con unas ansias de más y más buen blues español, que no tiene nada que envidiarle a los de otros países.
Señores el blues en España está vivo, es auténtico y este disco lo demuestra.
Larga vida al blues.